Teatre Poliorama

I got to see a Flamenco show in Spain!!!
The show I attended was called «Opera Y Flamenco».if you didn’t notice it’s Opera singing and Flamenco dancing heh.
I have absolutely no idea if this show was legit or even considered a good show to Spaniards, but I thoroughly enjoyed it. Both the singing and dancing were fantastic. Not to mention, the live mini orchestra playing in the background.
The cast was very in tune with their roles and it really pulls the audience in.
–I can’t remember what the price range was but I paid 35 euro and i sat in the 5^th or 6^th row from the stage.
–I’d say Flamenco and a bullfight are 2 must-​see things when visiting Spain.

Domingo por la tarde, llevas todo el día resacosa, la noche anterior fue de gran desfase. Fiebre del sábado noche. Vas a comer, das una vuelta por la Barceloneta, subes por las ramblas y pam, el Poliorama.
Y si vamos al teatro? Venga va, cuando es la función? Dentro de una hora, venga, esta obra tuvo mucho éxito y ahora la reponen (se trataba de «El métode Gronholm»).
Ubicación excepcional y siempre con una obra de gran éxito al frente.
Andando por les rambles y si pasas por delante, estoy segura de que no podrás evitar ir alguna vez.

En Barcelona la oferta cultural afortunadamente es muy extensa, aunque uno a veces ni tiene tiempo ni dinero para poder satisfacer tal demanda de acontecimientos culturales. Aún así al teatro acudo cuando se dan dos circunstancias: tengo disponibilidad y hay una obra interesante. Y esto sucede al menos una vez o dos veces al trimestre.
El Teatro Poliorama se encuentra en la planta baja de la Real Academia de Ciencias y Artes de Barcelona, al principio de la Rambla. Es uno de mis teatros favoritos. No es el más grande, ni el más bonito, y quizás el que mejor programación tenga, pero está muy céntrico, tiene una muy buena acústica, es confortable y en él he visto grandes obras de teatro («El Mètode Grönholm», «Non Solum», con un inmenso Sergi López, «Dos Menos» con Jose Sacristán y Hector Alterio o «La Diferencia», una perfomance-​concierto del inimitable Albert Plá, por citar las más recientes)
En el Poliorama también asistí por primera vez a una obra en versión original con subtítulos. Fue la versión teatral de 1984 dirigida por Tim Robbins. Una experiencia única con un público hipnotizado que no hizo el mínimo ruido en las más de dos horas que duró la función. Aquí se nota que la gente vive y disfruta el teatro por los cuatro costados.
En este teatro siempre hay una obra interesante en cartelera. Si no vives cerca o tienes muchas más cosas importantes en las que pensar, puedes subscribirte a su newsletter en el que te mantendrán informado de todas sus actividades.

Me gusta el Poliorama. Primero, por su localización: en calles tan saturadas de gente, me gusta esconderme de golpe en un teatro o cine para desintoxicarme, aunque sólo sea para pasear unos minutos y volver a salir. Segundo, por su entrada modernista de columnas altas y techos elevados, que hacen que ya se empiece a crear cierta liturgia. Tercero, porque hay un local de bocadillos justo al lado, que te ayudan a pasar la espera para la función. Cuarto, por la sala, con sus butacas bien dispuestas, que se van elevando para permitir la visibilidad de forma gradual (ahora bien, id a la platea).
Quinto, por su escenario, de unas dimensiones más que correctas sin ser descomunales ni ridículas. Sexto, por su programación: programación (a menudo) comercial y (a menudo) de calidad. El Tricicle, Pep Bou o El Mètode Grönholm han pasado por su escenario y mi retina. Séptimo, por un poema visual de Joan Brossa…, a ver si lo encontráis. Octavo, porque sí, porque quería llegar al ocho fuera como fuera. Noveno, ¡se acabó la función! Décimo, ¡aplausos!