Tramvia Blau

Es ist zwar nur ‘né Straßenbahn, aber sie hat Flair und ist nützlich zum Transport Richtung Tibidabo. Von der Metro Haltestelle nicht weit entfern, muss man dennoch die Abfahrtzeiten berücksichtigen, vor allem wenn’s wieder bergab geht.
Begrenzte Sitzplatzzahl, aber spannendes Reiseerlebnis durch die Platanen gesäumte Allee

No te lo puedes tomar como medio de transporte como tal, sino como atracción turística en toda regla.
El tranvía azul es toda una institución en la zona, debe ser uno de los pocos que quedan en la ciudad, si no el único.
Te lleva desde la estación de metro hasta la puerta del funicular del Tibidabo.
No es barato y hay mil formas de subir hasta ahí mucho más económicas, pero qué quieres que te diga, tiene su encanto.
Pensar que este «cacharrito» está ahí desde 1900, que un como este mató a Gaudí y la cantidad de gente célebre o no que habrá pasado por ahí, me hizo dar el salto y subir al tren.
Obviamente es azul por fuera y todo de madera por dentro, son pocos los metros que sube pero se agradecen.
El precio es de 4 euros a la subida y 3 euros a la bajada (porque te hacen un 25% de dto si bajas en el mismo día, jajaja, muy inteligente por otra parte porque qué ibas a hacer allí arriba) y no puedes comprar ida y vuelta al mismo tiempo, no sé porqué.
Si volviera a Barcelona no volvería a subir, porque hay un autobus que te lleva desde casi el mismo sitio y por 2 euros o por nada si tienes la tarjeta de transporte, pero me gustó la experiencia y la recomiendo sin duda.

This is a slight attraction in its own right, but the main draw is the view from the top when this is finally over. The cable car moves at a snails pace, which I guess is part of the charm. Take it to the top of Tibidabo for the park and views of Barcelona.

Yo no catalogaría el Tramvia Blau de Barcelona de transporte público. Vale, sí, lo es… pero más que un transporte público, lo tendríamos que enmarcar como un tesoro histórico. Es el Tramvia más antiguo de Europa. Los tranvías que aún circulan arriba y abajo (siempre por el mismo recorrido) son… atención: ¡¡del 1901!
¿Funcionan? Sí, claro…
Siempre que he cogido el Tramvia Blau es para ir al parque de atracciones del Tibidabo. La combinación es perfecta Tramvía Blau + Funicular del Tibidado + diversión asegurada (sobretodo si vas con niños).
Cuando subo al Tramvia hago un viaje en el tiempo y me imagino cuantas generaciones y generaciones de padres e hijos que han subido al Tramvía con la ilusión que supone ir acercándose poco a poco al parque de atracciones.

Las ciudades con tranvía tienen algo ganado desde el arranque: mi cariño. Tanto hay que apreciar los intentos de Barcelona por relanzar las viejas líneas de tranvía con nuevos vehículos, como de proteger las antiguallas más memorables. En el caso de Tramvia Azul estamos hablando de lo segundo. Un tranvía centenario que acaba en el funicular que lleva al Tibidabo.
Móntate y viaja en el tiempo hasta principios de sigo, una época en la que las cosas (estoy seguro) eran mucho más fáciles o al menos más bonitas.

Atractivo turístico y atropello del germen de futuros imanes turísticos: un tranvía como este acabó con la vida de Antoni Gaudí.
La línea cuenta con coches de 1901 y 1903 y va desde la plaza John F. Kennedy hasta el funicular que lleva al parque de atracciones del Tibidabo.