El Salaito

Este local es acogedor, tanto en su aspecto como en el servicio. El camarero es cordial y simpático, y nos aclaró las dudas respecto al menú.
Ahora bien, lo que importa realmente es la comida. Mi veredicto es exactamente lo que pone en la evaluación de estrellas de Unilocal: «normal — ok». No puedo suspender la comida, bien servida, y no tiene puntos negativos. Pero los sabores brillan por su ausencia, os explico.
El milhojas de berenjena (ver foto) era de sabores suaves y apenas destacable, con una pequeña ensaladita de acompañamiento. La berenjena se combinaba con un queso mozarella y unas rodajas de tomate. Bien… pero nada memorable.
La carne mechada algo mejor, tiras de carne con salsa y un poco de arroz de acompañamiento. Lo cierto es que no me ha parecido nada extraordinario, muy suave también.
Finalmente unas natillas de postre han mejorado un poco una comida de sabores más bien insulsos, sin colorido.
Un precio de 9’80 € no es caro, pero no es un regalo. Pienso que mejorar en el uso de sabores no es muy complicado, es lo que he echado en falta.

En Barcelona hay muuuuuchos sitios para comer, pero, también es verdad que a muchos de ellos les hace falta cariño y ganas. Este por suerte no es el caso de este pequeño pero acogedor restaurant ubicado en el barrio de Les Corts, muy cerca del metro y a 10min andando de Diagonal (CC Pedralbes Centre).
Fui un sábado y probé el menu desgustación que además de variado estuvo bastante resuelto! Ensalada de salmón, arroz con mariscos, costillas de cerdo, wellitong de carne! Por supuesto + vino y postre! Su consigna es que se puede comer sano y saludable sin temor a Dios!!!
Les sigo a traves de las redes sociales y siempre varian el menu! Lo bueno es que ahora también abren los sábados por la noche!
Es atendido por sus dueños y eso se nota y se valora!!! Larga vida al Salaíto!

Un buen lugar por la zona de Les Corts para desayunar o comer! El menú en la semana vale 9,80 € y no son los aburridos huevos con patatas, sino platos mucho más interesantes y elaborados que fusionan el sabor mediterráneo con otros estilos; además de incluir la bebida y el postre. Se agradecen las copas heladas para la cerveza (a mí me gusta mucho beberlas así!) y tengo entendido que pronto sus paredes servirán como espacio de exposición para que artistas y fotógrafos locales muestren sus obras.

Excelente comida mediterránea con sabor a casa cocinada por Juanan, el chef. Es atendido por Javi, que hace pases un rato agradable y que quieras volver cada vez que puedas.

Deliciosa comida y muy esmerada atencion, no dejen de probarlo se los recomiendo!!!