Forneria Artesana de Barcelona

Descubrí ésta Forneria artesana –que me vino de perlas, todo sea dicho– para desayunar antes de una visita rutinaria que tenía en un hospital cercano. Y para allí decidida que me fuí.
Grata sorpresa me llevé cuando, al cruzar la puerta al interior del local, vislumbré tras su amplio mostrador gran variedad de productos de bollería –adjunto fotografías– y tentempiés salados que tenían una pinta estupenda.
Pedí y tome asiento avanzando por el local, el cual dispone de varias mesitas, que es justo lo que buscaba.
Me decanté por un zumo de naranja natural y un bocadillo de jamón del país que estaba buenísimo.
Me lo sirvieron rápidamente pese a que era una hora concurrida y me lo prepararon al momento, con lo que el servicio me pareció más que correcto.
También probé uno de sus croissants, el cual estaba muy rico, tostadito por fuera y tiernecito por dentro como a mi me gustan y como en pocos lugares se encuentran ya.
La verdad es que estuve muy a gusto y quedé muy satisfecha, tanto por el servicio, como por la calidad de los productos.
Además el local está decorado de manera muy divertida y colorida, lo que le da aún más puntos a su favor.
El precio fue de lo más correcto, cosa que no esperaba, ni por los productos ni por la zona en la que me encontraba, pero de nuevo otra grata sorpresa.
Sin duda, quedé encantada con la Forneria y sin pensármelo dos veces, optaré por ella siempre que me encuentre por las cercanías.