Jazz Sí Club

… ist ein absoluter Geheimtipp, wenn man sich in Barcelona etwas Kultur ab von den Touristen antun will. Wer kubanische Musik, Jazz, Blues oder Flamenco mag, sollte mal nachschauen, ob nicht gerade ein entsprechendes Konzert im Jazz Si stattfindet. Danach ist dann immer noch genug Zeit sich ins Nachtleben dieser Stadt zu stürzen…

Un clásico para música e vivo, ambiente familiar. Doble piso para ver el concierto desde arriba. Cervezas y poco mas. Precio entrada depende pero sobre unos 10 euros

Centrally located in the Saint Antoni and Ramblas area, this place provides free jazz entertainment — well we each bought a drink at 3 euro. We got there close to the end of the show but still got a good 45 minutes — show ended a little after 10:15pm.
Definitely check it out if you’re in the area!

El Jazz Sí es para mi un lugar donde la entrega emocional del artista hacia su publico es total. Hablo aquí de espectáculos de flamenco
Esa entrega se nota hasta en el aire, el publico esta muy cerca del escenario, de los artistas, hay vibraciones, hay respeto, el publico mismo esta rendido hasta he visto lagrimas una vez. La intensidad de los aplausos podría romper cristales. Esa química funciona gracias al pequeño aforo del local, a unos dueños super majos y entregados a la música y unos pedazos de artistas.
Aunque el local es siempre abarrotado de gente, el ambiente caluroso, le doy un 5 estrellas por la autenticidad, por la experiencia emocional vivida, por ser lo que es, único, sin mas!

Excellent club with a great vibe. Music doesn’t go very late, till about 10pm, but there is a nice rotating cast of musicians. The house band is excellent and they are very quick when changing musicians.
Although the «open jam» is open, make sure you get there early to sing up, or you risk not being able to sit in. Also, the bar and the crowd is designed to be focused on the music, rather than being a background for the crowd. So it’s more like a concert than a typical «american bar band» vibe.

El Jazz Sí es uno de esos locales que ahora mismo le pongo 4 estrellas, pero en otro momento podría darle sólo 2… Siempre está petado, pero petado en un sentido «aquí puede haber una tragedia», hace un calor del demonio (incluso en invierno) y cobran de 5 a 8 euros la entrada con una consumición… pero cuando comienzan los espectáculos, se te olvida todo esto y da igual si estás cómodamente en una silla o con los pies en el aire, casi colgando de una escalera… yo sólo he ido en noches de flamenco y son shows impresionantes, de esos que ponen la piel de gallina (incluso he visto a un par de personas llorando, quiero creer que de la emoción).
Los encargados, unos señores un tanto mayores ya, se entregan totalmente y presentan a los artistas con un discurso que me recuerda a las palabras del típico familiar borracho en una boda… pero llenas de mucha emoción y con más gracia. El flamenco, el jazz y el blues son géneros que suelen a traer a personas adultas… así que si lo recomiendan a alguien, no se olviden de advertir que encontrar un buen lugar para ver el espectáculo puede ser casi imposible. Eso sí, bien merece la pena !

Este local es conocido por tener sesiones de jam session y espectáculos musicales durante toda la semana. Por solo 5 euros u 8 euros (depende del día y el espectáculo) tienes derecho a una consumición y a disfrutar de buena música.
El local no es muy grande y casi siempre está llenísimo por lo que es recomendable llegar con un poco de antelación.
Los domingos celebran una interesante jam session, en la que además de actuar un grupo fijo, cualquier persona del público puede salir al escenario a tocar un instrumento o a cantar.
Se agradecen lugares como estos. Me encanta!

When I lived in Barca, this was a regular stop on our nightlife tour. Amazing jazz music to be heard, and you never know who will be playing. Plenty of Estrella and Vol Dam available, just make sure you get creative with your seating arrangements! Definitely not on the tourist tour, and I hope it never is.

Este club del «Taller de Músics» es una ocasión perfecta para ir a ver música en vivo mientras te tomas unas cervezas. El local es pequeño pero con mucho encanto. Una parte de abajo con algunas mesas y sillas de las cuales la mayoría queda inservible cuando empiezan las actuaciones, y un altillo con un pasillo que se dirige a los lavabos, pero que es utilizado como palco para ver los shows. Así puedes estar sentado en el suelo del pasillo con las piernas colgando hacia la planta baja mientras ves una jam-​session, que es lo más habitual en el club, ya que además de ir a ver las actuaciones, puedes ir a tocar alguno de los instrumentos de los que disponen dependiendo del género musical de ese día (es recomendable saber tocar para no hacer el ridículo). Abre todos los días y cada uno de ellos tiene una programación diferente. Por ejemplo los viernes hay flamenco, los sábados jam-​session de jazz y los domingos jam-​session de rock y blues. Los precios varían dependiendo del día entre los 5 y los 8 euros con una consumición, y los miércoles es gratis. Por cierto si eliges colocarte arriba al fondo del pasillo, puedes pedir las consumiciones desde allí ya que la barra está justo debajo, y así te ahorras dar toda la vuelta cuando está atestado de gente. También tienen menús al medio día aunque aún no he comprobado su calidad.

El Jazz Sí Club es un pequeño espacio para músicos, tanto profesionales como amateurs. Conocido por sus Jam Sessions, si tocas algún instrumento y tienes ganas de improvisar con una banda, este es el lugar perfecto para lanzarte al escenario. Yo soy fan de las sesiones de flamenco de los Viernes, en la que se puede escuchar «flamenco de verdad», como dice el dueño y maestro de ceremonias. Por 8 euros puedes disfrutar de un concierto de flamenco auténtico más una cerveza. Normalmente, hay un cantaor acompañado de un guitarrista, sin micrófonos, sin amplificaciones, puro flamenco en directo y a viva voz. Es uno de mis lugares preferidos para llevar a mis amigos extranjeros de visita a la ciudad, ávidos por acercarse a la cultura española. El único pero que le pondría es que hay que llegar un poco temprano para conseguir una silla y una mesa. Aunque, en realidad, si no se consigue da igual, porque sentarse en el suelo del primer piso o en las mismas escaleras también tiene su gracia. Lo importante es que, estés donde estés, siempre estarás cerca del escenario y no podrás evitar que se te ponga la piel de gallina con esos cantes a grito pelao.

Este mítico lugar de visita obligada para los amantes del jazz y del flamenco, abre todos los días del año y la música no deja nunca de sonar. Es una suerte contar con un espacio así, porque cuántas veces no hemos pensado: «me encantaría escuchar música en directo». Pues el Jazz Sí es ese lugar incondicional. Se trata del local de actuaciones del Taller de Músics, escuela fundada en el otoño del 1979. El Jazz Sí Club llegó un poco más tarde, en el arrollador momento de las olimpiadas del 92. Está en pleno Raval y se pensó en este espacio como la prolongación de la escuela, donde los músicos pudieran experimentar el escenario con público y en directo. Y desde luego que vale la pena hacer de conejillos de india, porque la calidad suele ser muy buena. Sobre todo están interesados en potenciar a nuevos músicos de la ciudad, sean o no alumnos del Taller. Y de vez en cuando puedes llevarte una sorpresa y encontrar sobre el escenario a algún reconocido músico que viene a recordar sus inicios en el Jazz Sí. Los precios van de los 5 € a los 8 € siempre con consumición incluida. El ambiente es familiar y cercano –no sólo porque el lugar sea pequeño– y público y artista se mezcla con facilidad. Ah, y una mención especial a su propietario, nunca mejor dicho «hombre orquesta» porque además de encargarse de la programación musical, es el técnico de sonido de los conciertos y el chef de cocina para los menús de a diario de lunes a viernes.

Manchmal stolpert man auf Städtereisen, bei denen es während eines langen Wochenendes eigentlich reicht, das touristische Pflichtprogramm abzuarbeiten, völlig unverhofft in Situationen, die sich als magische Momente entpuppen. Solche, die wir früher in Schulaufsätzen als schönstes Ferienerlebnis geschildert haben.
So war’s am vergangenen Sonntag in Barcelona. Im kostenlosen Musik-​Veranstaltungskalender Gig Magazine (
, liegt unter anderen bei der Touristeninformation an der Plaça de Catalunya aus) las ich von einer Pop-​Rock-​Blues-​Jam-​Session mit Ester Ovejero (volcánica cantante genannt, also so etwas wie ein gesanglicher Vulkanausbruch). Eintritt: fünf Euro, Beginn: 18.30 Uhr. Eine gute Zeit, da die meisten Restaurants nicht vor 20, 21 Uhr öffnen.
Der Club verbarg sich in einer kleinen Gasse und war so, wie man sich einen hippen Jazz-​Club vorstellt, aber zu selten antrifft: gerammelt voll (auf zwei Ebenen einige Zuschauer quetschten sich auf ein unter der Decke angebrachtes metallenes Emporengerüst), heiß, verraucht. Wir zahlten fünf Euro pro Person und erhielten fürs Ticket gleich auch noch das erste Getränk.
Auf der Bühne brach gerade Vulkan Ester aus. Zusammen mit einer kompetenten Hausband drückte sie Pop– und Rock-​Klassikern ihren eigenen Stempel auf. Wobei sie es schaffte, selbst der abgenudelten Phil-​Collins-​Ballade Another Day in Paradise mit ihren stimmlichen Urgewalten neues Leben einzuhauchen.
Und dann ging es Schlag auf Schlag. Der Moderator bat in den nächsten zwei Stunden eine Unmenge von Gast-​Sängern und Musikanten auf die Bühne, die jeweils einen bis zwei Songs lang quer durch die Genres ihr Bestes gaben. Und das teilweise auf einem überraschend hohen Niveau.
Eine besonders gelungene Session habe ich gefilmt und diesem Beitrag hinzugefügt der Clip ist mit neun Minuten recht lang, dürfte aber trotz der schlechten Tonqualität die Spielfreude der Improvisationskünstler gut vermitteln. Hier noch Kurzclips mit drei weiteren Gästen:
Video link:
Die Pop-​Rock-​Blues-​Jam-​Session findet jeden Sonntag ab 18.30 Uhr statt, jeden Samstag ab 18.30 Uhr treffen sich Jazz– und Latin-​Jazz-​Musiker im Jazz Sí zu einer ähnlichen Veranstaltung.
Video link: