Mamarosa Beach

Fuimos porque nos regalaron un cupon de groupalia para dos menu degustación (aunque tengo que decir que hace un tiempo ya y aun sigue la oferta)
El sitio esta justo debajo del hotel vela y la decoración toda de madera blanca desgastada con terraza justo con vistas a la playa. Muy bonito.
El menu incluia:
Aperitivo:
Aceitunas verdes condimentadas con aceite y especias
Bruschette de paté de aceitunas negras
Entrantes
Carpaccio de pulpo aderezado con suave salsa de olivas negras, tomate seco y aceite virgen extra
Chipirones fritos acompañados de una ligera reducción de cerveza Guiness
1º plato:
Pennette salteados con tiras de calamar en juliana y ragout de frutos del mar aderezados con especias y vino blanco
2º plato a elegir entre:
Dorada alla Trinacria con salsa de tomate cherry, alcaparras, aceitunas y albahaca
Tagliata de entrecot de Nebraska con suave salsa aromatizada a la pimienta
Postre a elegir entre:
Panna cotta con fresa
Semifrío de chocolate blanco y maracuyá
Todo estaba muy rico. Y es que somos muy fans de los menus degustación porque vas comiendo un poquito de todo y es que nos pirra probar probar y probar. De los platos donde teniamos que escoger nosotros nos decantamos por tagliata de entrecot y de postre panacotta de fresa.
Por el cupon a nosotros nos salio 19e/​persona. Sin el cupon serian 38e/​persona

Nice mid-​range Beach restaurant, behind the W hotel. Food and price are correct. The ambiance is cosy. Staff are professional.

Let’s start with the positives — the view is amazing and the restaurant is located in a great central area to all the beach activities. The restaurant was trying their best to accommodate.
Now for the negative — food was more on the bland side and could use a little bit of kick. We ordered pizza and it came uncut which I have never seen and had to send back to get cut.
I ordered a salad with vegetables and it was more like oil with a side of vegetables. It was mediocre at best. A passing by restaurant that I wouldn’t remember nor care to. It was just food for energy but not an experience.

El Mamarosa Beach es uno de los establecimientos en la zona pública del Hotel W de Barcelona. Goza de una vista increíble, tanto dentro como fuera, de la playa de la Barceloneta. La comida es italiana con un corte cosmopolita. La pizza es extrafina como a mí me gusta y personalmente creo que es lo mejor de la carta. El servicio es correcto y las instalaciones son ideales para fiestas y cenas de grupos.

El lugar es muy agradable y la ubicación esta conveniente para ir a cenar ahi antes de salir al vela… Los meseros son muy amigables ya que llegamos un poco tarde y de todos modos abrieron la cocina para atendernos… El tartar de atún esta buenísimo y el ambiente del lugar esta muy bien!

Nos apetecía un taglio di pizza y nos decidimos por Mamarosa Beach que nos habían dicho que las hacían en horno de piedra! Vistas al mar, todo muy relaxed y unos entrantes buenísimos! Recomiendo la Velina di Polpo y los chipirones a la Guinness! Volveremos pronto!

Fui con unas amigas a celebrar un cumpleaños, el sitio es muy bonito la comida está riquísima, el encargado y los camareros muy atentos, hemos ido con los niño y ellos disfrutaron muchísimo pq podía esta delante del restaurante jugando. Además sin decírselo, sacaron una botella de cava con una bengala junto con el pastel y nos encantó.

Amazing music — incredible drinks !!! Such a location !!!
The service was disastrous ;(they tried to make it up at the end !!!

En los bajos del hotel W se aspira glamour, cosmopolitanismo, vanguardia, elitismo, … Si además le unes unas vistas espectaculares de Barcelona, el olor a mar, la brisa de verano, una buena decoración… umm!!! fettén!
PERO (tenía un amigo que me decía… cada vez que oigas un PERO olvida todo lo anterior, lo imporante viene después), lamentablemente, ahí se acaba todo. El restaurante Mamarosa no es un sitio para frecuentar por gente local. Su servicio es lento, la distribución del local se ha realizado buscando la máxima eficiencia del local, no el confort del comensal… y si aso le sumas unos precios excesivos… uf! se convierte en una experiencia de pizza-​chic de playa en el que los precios no compensan la calidad del producto (que sea dicho, no es malo)
Lo recomiendo para acompañar a visitas a la ciudad. Los lleváis al Wet a tomar un mojito, después cena en el Mamarosa y después un gintonic en el Eclipse. Quedaréis como unos cracks, pero será una noche centenaria (de 100 euros: P)

Compramos un cupón en Groupalia por 18 € que incluía entrantes, un plato de gnocchis, pescado o tagliata y postre. El restaurante está debajo del Hotel W, y pensamos que haría buen día, que podríamos disfrutar de la terraza y de que el sitio estaría bien.
Nada mas lejos de la realidad, nos encontramos con un servicio mediocre, tiempos muy largos entre los platos, raciones escasísimas y de mala calidad (por ejemplo, el segundo eran gnocchis, y pusieron sin exagerar 4 en cada plato), y en general nos dió la impresión de que nos estaban tomando el pelo. Seguramente la calidad de la comida era igual de mala para todos los clientes, pero desde luego que las raciones y el servicio para la gente que compró el cupón, fue muy muy malo.
Además, como las bebidas no estaban incluídas, pagamos casi 40 € por un vino blanco de 18 € y 3 coca colas y 1 agua… demencial.
Lejos de intentar captar clientes, el Mamarosa los auyenta. Nosotras desde luego no volveremos y tampoco se lo recomendaremos a nadie.
Mil veces antes, vuelvo a La Viblia que está al otro lado, y por casi lo que pagamos entre el cupón y las bebidas, hubiéramos comido de PM y nos habrían servido de cine.
Una M mayúscula…

Probé este restaurante a través de una oferta en Groupalia, en la que por 18 euros tenías un menú con un pica pica y un segundo a elegir. La verdad es que no tuvimos una buena experiencia… La calidad de la comida nos pareció a todas (5 personas) muy justita y las raciones muy escasas. La sorpresa llegó cuando nos traen la cuenta con la bebida (en el menú no entraba) y nos cobran 40 euros (al final el menú salía por 26 euros y os como vayas con un poco de hambre lo llevas claro).
¿El servicio? Pues deja mucho que desear. Cuando pedíamos cualquier cosa tardaban mucho en traerlo y la chica que nos servía parecía hablarnos sin ganas. No le pongo 1 estrella ya que el local es chulo y tiene un a terraza frente al mar, con vistas a la playa de San Sebastián. No creo que vuelva pero si se da el caso, pediría una pizza que quizás hubiésemos salido más contentas.

El hermano playero del local de Casanova les ha salido guapo.
Es el último de la ristra de flamantes espacios de restauración (Pez Vela, Salt, Gallito…) de los bajos del hotel vela. Sí, el hotel vela, o Hotel W, ese armatoste que se saltó la Ley de Costas a golpe de euro. Pero bueno, ahora que el monstruo de cristal no hay dios que lo mueva de ahí, habrá que resignarse y darse una vuelta para buscarle algún lado positivo al desembarco de pijería en la zona. ¿El lado positivo de la pijería? Pues sí, los borjamaris creen que les gusta lo bueno, y suelen cagarla por esnobismo y falta de criterio. Pero a veces, solo a veces, aciertan. Es el caso del arroz del Pez Vela (mu rico) y también de las pizzas del Mamarosa (estupendas). La pasta y las ensaladas, para mi gusto, están en la media, pero el hecho de tener un buen horno de leña y estirar la masa pizzera hasta límites insospechados, para convertirla en un delicioso pergamino, le dan un plus al sitio. Los ingredientes son de calidad y todas las que he probado son de notable alto, rallando el sobresaliente; además de fardar de buen diámetro.
Corolario: Pasearse por la zona es como ir por Santaló o Mandri, pero con playa y muchos más guiris (de pasta). Si te sabes abstraer, o incluso cachondearte del panorama, te vas a divertir contemplando bronceados imposibles, labios de zodiac, futbolistas con gomina, famosas anoréxicas… y en el Mamarosa pagarás entre 9 – 15 € por una pizza buena, en una terraza que, de noche, te puede transportar a la Costa Brava. Espectáculo garantizado.
Ah, además el chaval que hace los cócteles es muy majo, curraba antes en el Nosè del Passeig del Born. Pedidle un gintónic con albahaca y naranja.

Sin lugar a dudas la mejor pizza de Barcelona!!!
Fui recomendado por un sibarita de las pizzas mi amigo Gerard y me comentó que comeríà la mejor pizza de mi vida… Pues bien tengo que deciros que acertó de lleno! El local es muy bonito con excelentes vistas a la playa de Barceloneta con las torres Mapfre al fondo, y dispone de una terraza fabulosa para poder comer en los meses de verano.
Mi elección a la hora de comer fue una pizza que lleva jamón de pato con queso de cabra y brie, y burrata como entrante… Todo estaba riquísimo, y de precio algo elevado pero teniendo en cuenta la zona donde esta y lo excelente que se come… Vale la pena!