Vell Poblenou

Thorough accommodating staff were friendly while I worked through my poor Spanish :). The tomato with buffalo mozzarella blew our minds and the croquettes made us wonder why we’d not tried them before. Seriously fresh scallops and octopus that tasted of the sea. Don’t miss the dark chocolate mousse with orange notes — it was the perfect ending to a truly world class meal.

El mejor arroz que he probado en Barcelona y un servicio excelente.

El pasado sábado día 10 de agosto, mi querida mujer y una de sus mejores amigas quedamos para cenar y dar la bienvenida al inicio de las vacaciones.
El restaurante elegido fue el Vell Poble Nou, situado en el barrio del mismo nombre, muy cerca de la Rambla, en una plaza muy tranquila y agradable.
Reservamos a las nueve en punto en su terraza.
Con puntualidad británica llegamos al restaurante. La mesa donde nos sentemos es perfecta y la brisa que corre hace prever una gran velada. Como de costumbre y siguiendo la tradición pedimos unas cañas reglamentarias para observar la carta con dedicación.
La carta es sencilla, con entrantes, arroces, huevos estrellados variados, carnes y pescados. Disponen de otra carta con productos frescos del día.
Finalmente nos decantamos por los siguientes platos, para compartir: Croqueta de espinacas, una grata sorpresa, estaba muy buena, crujiente y con un sabor fabuloso, los piñones de dentro un gran acierto, no llegan al top 5 de Barcelona, pero sin duda sí que son de las mejores del barrio; continuamos con, Papas arrugadas, muy buenas, patata de gran calidad y las salsas que las acompañaban estaban exquisitas; seguimos con unas sorprendentes vieras a la plancha con verduras, fascinantes, muy buenas, de gran calidad, buena textura y buen tamaño, las verduras estaban perfectamente cocinadas. Sin duda las Vieiras fueron las gran triunfadoras de la noche.
Como plato principal e individual nos decantamos, los tres, por la hamburguesa del señor Sánchez, acompañada por patatas fritas. Una delicia de hamburguesa, carne de ternera de primera, muy bien de cocción, una gran hamburguesa que no necesita la estúpida etiqueta de «gourmet» tan de moda últimamente por Barcelona. De diez el plato, las patas fritas caseras, estaban muy buenas. Disponen de mostaza Maille y Loulit.
Lo bañamos con un siempre excelente Pago de los Capellanes Roble 2.011. Maravilloso. Lloré por dentro, como siempre que lo pruebo. Lo sacaron a su correcta temperatura, detalle que se agradece enormemente.
Omitimos postres y tomamos cafés.
Total: 27 euros por persona.
Un gran restaurante. Sin colorantes ni artificios, sin engaños. Hacen lo que saben hacer y lo hacen bien, sin más, sin estridencias. De lo mejor de Pueblo Nuevo. En zona tranquila y agradable terraza. Su interior es algo sobrio donde predomina el color azul. Buena cocina y buen chef. Precios muy correctos. Se nota que intentan ofrecer calidad y productos frescos. Desmarcándose de los muchos locales del barrio que siempre ofrecen lo mismo. Servicio, atento y agradable. Carta de vinos pequeña, pero con algunas interesantes referencias.
En definitiva un muy buen restaurante que hay que tener en cuenta.
Para acabar nos fuimos al hotel Me que está muy cerca a degustar un gin-​tonic de Hendrix, en la agradable y redecorada terraza que tienen al entrar.
Señores y señoras, no lo duden, el Vell Poblenou es una buena casa de comidas, vayan y disfruten.

Every time I visit Barcelona, this is the restaurant I must visit. Reservations are mostly a must because the place becomes packed on weekends after 3 pm and also after 8pm. I had the bacalao with lemon sauce which is just amazing. When you order a burger rare… it is literally cooked for seconds and served pretty much raw. The quality is so great that you can taste the freshness. I would highly recommend you make your way out of the main city into this somewhat quiet Poblenou neighborhood for some amazing restaurants away from tourist traps.

Seguramente existen muchas razones para recomendar este restaurante: calidad exigente, gran variedad de platos, sabor tradicional, servicio atento, precio adecuado… Pero a mí se me ocurre sobre todo una, que en cierta medida resume todas las demás: un arroz negro antológico, tan bueno que te dan ganas de abrazar un calamar para darle las gracias por la contribución de su especie.
Para bolsillos un poco más holgados también está el de bogavante, igualmente muy rico; aunque yo me quedo con el primero sin dudarlo.
En cualquier caso, el Vell poblenou es muy recomendable para esos domingos de buen tiempo en que apetece coronar la semana con una buen arroz o una fideuá, cerca del mar, en un barrio de tradición marinera. Ahí queda eso.